La calidad de la gestión pública tiene sentido impacto en la ciudadanía. Comoquiera que la soberanía del Poder Público en Colombia está en su población, a quienes por excelencia se debe el Estado Social de Derecho, es a esta a quien por naturaleza le corresponde velar por el correcto ejercicio de la función pública.

Los servidores públicos elegidos popularmente constituyen apuestas sociales de un buen gobierno. Aunque las instituciones regulen su actuar, es imprescindible su control y acompañamiento, ya que las decisiones que toman no siempre son las más adecuadas y, en todo caso, tienen incidencia en la población, incluida aquella porción que no los eligió.


El control público emerge como un mecanismo adecuado para el correcto funcionamiento de la administración pública. Se entiende así, cómo el ejercicio del poder soberano contribuye a ratificar la obtención de los fines esenciales del Estado, buscando corregir el camino cuando se presentan brechas que inciden en el nivel deseado y esperado de bienestar de la sociedad.