Este libro es una apuesta de diálogo intercultural que tiene como propósito visibilizar la relevancia de los movimientos indígenas y contribuir a develar los alcances sociales, jurídicos, ontológicos y epistémicos de sus luchas en América Latina. Se trata de un tejido de diferentes voces, experiencias y reflexiones que permite comprender cómo los movimientos indígenas han reapropiado los dispositivos de dominación, construyendo resistencias fundamentadas en sus cosmologías.
En la misma línea, los textos que componen este libro reflexionan sobre las estrategias y formas con las que los pueblos indígenas han enfrentado las presunciones de imparcialidad que proclama el derecho internacional. Para hacerlo, seguimos la idea de indigenizar el derecho, tomándonos en serio el pensamiento, la historia y los haceres de los movimientos sociales indígenas, incluyendo sus variantes feministas y ambientalistas.