El competente trabajo presentado en este libro representa el rescate de un período de nuestra historia continental que clama continuidad e invita a las nuevas generaciones a dejarse llamar hacia dentro de esta realidad del reino de Dios y busquen llevarlo a la práctica en este continente que aún tiene tantas venas abiertas. Y, al mismo tiempo, da testimonio de hermosas y transformadoras expresiones de cuidado y cariño, y caminos de esperanza que alimentan la sucesión de generaciones que celebran y se comprometen con una experiencia vocacional marcada por la justicia, la paz y el gozo en el Espíritu Santo (Ro 14.17), como señala el apóstol Pablo al hablar del reino de Dios.
Saludo esta hermosa obra de Martín Ocaña Flores, y ruego a Dios para que podamos beneficiarnos de ella a nuestra manera, individual y comunitaria, con el propósito de buscar primero el reino de Dios (Mt 6.33), citando una vez más al propio Jesús.
-Valdir Steuernagel