Jorge Ortega Blázquez, fiel a su predilección por una literatura quepodríamos llamar agenérica, dispone este nuevo trabajo suyo a manerade tríptico, y lo divide en tres secciones: 'El encuentro', 'Los escolios'y 'Metanoia', que comparte título con la totalidad de la obra. A travésdel ir transcurriendo de sus páginas, en las que alternan la narración, eldiálogo, el ensayo y la lírica, nos ofrece reflexiones sobre interrogantescomo la esencia de las diferentes religiones y las mitologías que lassustentan, la verdadera naturaleza del ser humano, el papel que esteha de desempeñar en el mundo y otras cuestiones de índole más omenos existencial. El libro, como reza su subtítulo, no ha de gustar nial furibundo ateo ni a la ortodoxia religiosa más intransigente, perotal vez sí hacer las delicias del homo simplex, entendido este últimovocablo en toda su extensión semántica.